jueves, 10 de marzo de 2016

Las consecuencias de volver a dormir “5 minutos más”.



El sueño es un ciclo que debe de completarse para que el cuerpo pueda regenerarse y poder cumplir otras funciones a nivel cerebral, este ciclo está conformado por varias etapas que comienzan con el adormecimiento, el sueño ligero, el sueño profundo, hasta llegar a la etapa final del REM que es cuando el cuerpo se inmoviliza por completo y el cerebro funciona rápidamente, pero el sueño es más ligero y se encuentra más apto para despertar. 

Cuando uno despierta en algún momento del ciclo y desea volver a dormir, este empieza desde el comienzo. Es por eso que esos “5 minutos” no son suficientes para poder cumplir nuevamente con el ciclo y esto causa consecuencias en la salud tales como entorpecimiento, desorientación, problemas de concentración, problemas de memoria, entre otras. A este fenómeno se le llama “inercia del sueño” y ocurre cuando la etapa de sueño profundo es interrumpida repentinamente sin poder llegar al sueño REM. 

A pesar de que después de muchas horas de sueño, uno despierte soñoliento lo cual es normal, al pasar del día y con el movimiento uno se puede recuperar por completo, sin embargo, despertar y volver a dormir esos cinco minutos más, los síntomas de somnolencia pueden durar incluso todo el día y bajar el rendimiento dramáticamente.

 Incluso, recientes estudios comprobaron que el sueño interrumpido puede dañar la memoria a mediano y largo plazo, ya que investigaciones previas en animales demostraron que durante las horas del sueño, el cerebro realiza la función de elegir qué eventos recordar y cuales descartar, por lo que al interrumpirse el sueño significa interrumpir al cerebro tratando de guardar de manera permanente la información obtenida durante el día. Dicha consecuencia podría estar ligada incluso al padecimiento del Alzheimer o incluso a la degeneración del cerebro. 

Las recomendaciones es tratar de dormir al menos de 6 a 8 horas al día, en un ambiente en donde no se vea interrumpido tu sueño, y desde luego, tratar de levantarse al primer llamado de la alarma. 


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